La postura del guerrero
En la práctica de yoga existe un nombre para cada postura llamadas ¨asanas¨, pero como lo que a nosotros verdaderamente nos importa es el resultado de la práctica de estos ejercicios y el efecto beneficioso para
nuestra salud, me limitaré a mostrar como realizarlos para no hacerlo demasiado complicado y dejaremos el sánscrito para otra ocasión…
Como siempre digo, cada uno deberá encontrar ¨su propia comodidad ¨en
cada postura, sin forzar, manteniendo la concentración y siendo siempre conscientes de la respiración.
Aquí tenéis una secuencia de fotografías para que practiquéis este ejercicio
de equilibrio, que aunque parezca fácil, no lo es, sobre todo si nunca se ha
practicado anteriormente.
Por eso, cada uno adaptará su postura a la hora de realizarlo, para poder tener una experiencia positiva cuando lo practiquemos y obtener un buen resultado. No se trata de conseguir nada, simplemente respira y muévete para que trabajen tu cerebro y tus músculos .
1.- En pie, con las piernas abiertas y separadas, la punta el pie de la pierna
doblada apuntando hacia el frente y el pie de la pierna de atrás perpendicular a la pierna (girado ligeramente hacia dentro). Brazos estirados a la altura de los hombros, que están relajados y las manos estiradas.
Mantenemos la posición algunos segundos ( sera diferente para cada persona), de lo que se trata es de poder mantener la posición sin forzar ,relajados y respirando lentamente.

Ajustaremos las piernas hasta que
sintamos que estamos en una posición estable.
2,3 -Manteniendo los brazos estirados, inclinamos la espalda ligeramente
hacia atrás y los llevamos como si fueran las aspas de un molino hasta apoyar una mano sobre la pierna de atrás y la otra apuntando hacia arriba.
No importa dónde lleguemos a tocar (glúteo, muslo, corva o gemelo), lo importante es mantenernos estirados y poder aguantar la posición algunos segundos.
4,5,6.-Relajamos los brazos y llevamos el que estaba apuntando hacia arriba, doblándolo, apoyando el antebrazo sobre la pierna doblada mientras que desplazamos el otro brazo hacia la pierna doblada, siempre como un aspa de molino girando la cintura lateralmente todo lo que podamos,
alargando el brazo y la mano por encima de la cabeza. Mantenemos la posición algunos segundos.
Terminamos “deshaciéndo la postura,¨volviendo a la posición nº1,
manteniendos algunos segundos.
¡Buen trabajo!
Marta Crespo